Creo que me he intoxicado. Estoy pintando con spray de graffitera el techo de la sala de masajes y ahora veo a mi alrededor todo de nubecitas rosas. Además me pica un poco el hombro... (ah, no, que eso es una herida de guerra...) La boca me sabe como si me hubiera comido una cajita de gominolas de pimienta. Tengo ganas de ponerme morena y beberme un zumito de piña sentada en la orilla de una playa azul turquesa (ah, no, que eso es que llega la primavera...)
1 comentario:
Sí llega la primavera, pero ¿llegó alguna vez el invierno? Por aquí este año no ha nevado ni un poquito. Cuidado con los vapores tóxicos y ya me contarás qué batallas has librado últimamente. Muchísimos besos
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