15.3.08

Oui oui

He librado pocas batallas, últimamente. Por no decir ninguna, que suena a tristeza y desolación.
Aunque si recuerdo bien las viejas batallas. Aquellas en las que el enemigo acababa contando sus secretos a la luz de una almohada ajena y en las que se pedía a éste mismo enemigo que no dejara marcas territoriales para que nadie supiese que la invasión había sido más o menos consentida…
Ah, las viejas batallas… esas de las que sólo quedan el recuerdo y las antiguas heridas mal curadas.

1 comentario:

GAN dijo...

"Si hubiera podido echar ancla
a resguardo de alguna playa calma.
En un florecer de inviernos
lejos del mar abierto,varado de espaldas al alma.
Más fue tan raudo el vuelo, tan cambiante el señuelo,
tan rápida la batalla,tan rápida la batalla"

Tu post me ha recordado al maestro (menudo elogio ;), y a un sueño que he tenido que tengo que escribir, por cierto que ganas de volver a juntarnos en sus conciertos. Muchos besos que ayuden a cicatrizar tus heridas y te den alas para nuevas batallas.